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mañana despertaré cercano a mi muerte, empañado y contento, con el acercamiento final de aquellas cosas pendientes por venir, aquellas que tanto he deseado cuando tu cabeza se posa en mi pecho, los temblores se detendrán, no tendrán mas razón de ser, no sabrán el por que regresaban constantemente a mi, no entenderán la perdida de su memoria, tan solo será el ocaso, y no se si regresaré

mañana compondré unas líneas dedicadas a mi, a mi larga estancia, a mi larga ausencia

mañana congelaré algunas sonrisas, las guardaré por si regresas, al igual que llevo conmigo tu sabor para tenerte cerca, amargo, voraz, inquietante, la melancolía tal vez aparezca, brindaré con ella en silencio, espero atravesar este maldito riachuelo, esta devastada agonía, este brutal encuentro

mañana brincaré de alegría, algunas canciones recoradarán las ausencias, tardes, incompletas, solubles, recorreré los pasos que vayan dejando a sus espaldas, no quiero que tuerzan sus miradas, no necesito observarlos de frente, no quiero abrazarlos sonriente, quiero sus recuerdos agolpados, sin facciones de gozo, quiero sus pedazos hirientes

mañana beberé licores, probaré tragedias, calzaré mis medias, tus largos gemidos ocultos, bestias, el alcohol me despojará de mis mentiras cotidianas, tan revueltas, tan cansadas

mañana te quiero de vuelta, desliza tu cadera, adentra tu miseria, descongelada y absorta, ven y enredate, desnuda y trasciende, solo ven, sin hablar, no será necesario, no inquietaras mis mentiras, no sostendras el arma, yo la detengo y tu dispara

mañana brindaré, mañana, mañana danzaré

mañana será otro año en mi vida, o tal vez, tal vez tan solo otro día...